Con alma de campeón...

Por la primera fehca del clausura Boca se enfrentaba a Banfield. Se había hablado bastante durante la semana del estado del goleador de Boca Martín Palermo, quien tuvo grandes problemas personales (que no revelaremos por una cuestión de respeto hacia Martín) y se suponía que no iba a estar desde el arranque. Pero fue el mismo Palermo quien sorprendió a todos diciendo públicamente que pese a la complicada situación quería jugar el Domingo, Basile respetó su decisión y lo puso desde el arranque.

Cómo para coronar la emotividad de la historía, Palermo fue el goleador del partido con 2 tantos que lo hicieron llegar hasta las lágrimas. El partido terminó 3-0 con un Boca dominador a lo largo de todo el partido y un Bataglia inspiradisimo (autor del segundo gol). Boca arrancó como para repetir.